Isla Macquarie, donde emerge la tierra

Isla Macquaire

Aproximadamente a unos 1.500 kilómetros al sureste de Tasmania, casi en las fronteras entre Australia y la gélida Antártida, se encuentra la Isla Macquarie, el punto más al sur de toda Australia. Se trata de una pequeña isla perteneciente al estado de Tasmania, y cuya extensión no supera los 34 kilómetros de largo por 5 de ancho. Fue declarada como Patrimonio de la Humanidad en 1998.

Es el hogar de innumerables pingüinos, que hasta hace pocos años, habían sufrido una cruel persecución por parte de los navegantes, que buscaban alimento para sus incursiones en las aguas de la Antártida. También cerca de 120.000 focas fueron presa de los cazadores de pieles, lo cual llevó casi al exterminio de la población local. Hoy en día, y desde el año 1933, la isla está considerada como espacio natural protegido, debido a su hábitat y a las especies que la pueblan, pero también por otra razón de peso: su particular geología.

La Isla Macquaire es el único lugar del planeta donde se pueden apreciar a simple vista formaciones de roca procedentes del manto terrestre, que se encuentra normalmente a unos 6 km bajo el lecho oceánico.

Las formaciones emergentes que podemos contemplar en esta isla son impresionantes, y quizá sean las almohadillas de basalto las más relevantes e impresionantes, debido a sus caprichosas maneras de solidificarse. Este privilegiado emplazamiento ofrece a los geólogos un lugar único para el estudio de las capas inferiores de la corteza del planeta.

Hoy en día, la isla está deshabitada, a excepción de un destacamento de científicos que trabajan en ella, en un centro de investigación de la naturaleza dependiente del gobierno de Australia.

Año de inclusión en la lista de Patrimonios: 1998
Lugar: Tasmania
País: Australia
Otros Patrimonios de Oceanía: Patrimonios de la Humanidad en Oceanía

Foto vía: latabernadelpuerto

Tags:

Category: Patrimonios de Oceania

Imprimir


Deja tu comentario